Habíamos sido los primeros en grabar iniciando la gran era del Rock en español. Habíamos sido visitados en nuestros lugares de ensayo por amigos y colegas como Pepe Negrete y Toño de la Villa de los Locos del Ritmo, Enrique Guzmán de los Teen Tops, Ricardo Roel y Humberto Cisneros de los Hooligans, Horacio Reni y Fernando Bahauks de los Sinners, Leda Moreno y Lalo y Ricardo Carrión, entre otros.
Quería tapar el sol con un dedo. Frecuentemente estaba malo de la garganta y la miel de abeja con limón eran parte obligada de su equipo. Para colmo, viajaba regularmente con su familia a los Estados Unidos dejando al grupo sin vocalista.
No soportaba que Javier sacara el barco a flote. Cuando César viajaba, si los instrumentos estaban guardados en su casa, los dejaba al alcance de la mano. En una ocasión, estando él ausente, se le presentó al grupo una magnífica oportunidad para tocar en el Jockey Club. Asistirían prominentes industriales y banqueros. Para reforzar el show, Diego invitó a Lilian Bartá a cantar canciones de Brenda Lee. Javier ensayó al vapor y cantó los éxitos de la radio. Los Camisas Negras salieron airosos del evento y recibieron nuevas ofertas con el grupo así conformado.
A su regreso de los Estados Unidos, César al enterarse del citado evento hizo el gran berrinche. No acababa de entender que no hay nadie indispensable y que el grupo tenía que seguir su marcha. La próxima vez sería diferente. No le volvería a suceder. Le encargó a Martín de la Concha, su amigo y guarura, que en su próximo viaje, si los instrumentos estaban en su casa, los dejara guardados bajo llave. El grupo no tenía ni idea. En Febrero de 1961, se repitió la ocasión. Estando César en otro de sus viajes, el grupo tenía que amenizar la boda de una amiga de Diego en el Salón Candiles del Hotel del Prado. Alternarían con la orquesta de Pablo Beltán Ruiz.
Encontramos los instrumentos bajo llave. Martín nos negó la entrada. Carlos casi se agarra a golpes con él. Nos fuímos volados a conseguir instrumentos prestados. Fuímos muy aplaudidos en el evento. Juan Manuel tocó felíz con la batería del Pato, su maestro y amigo. Diego usó su antigua guitarra Kay. El cuasi pleito con Martín fue la gota que derramó el vaso. Juan Manuel anunció su retiro definitivo para dedicarse a sus estudios, causando con ello la desintegración del grupo. Yo me integré después a Los Hermanos Carrión y Los Sinners. Carlos se dedicó a la publicidad y Javier se fue a tocar con los Hooligans. Meses después, César, equipado con las baladas y ademanes de Paul Anka, con el apellido de su director Don Costa y con los swéteres de Diego de Cossío (ver la foto donde aparece serio Cesar por estar yo junto a Los Carrión y Emily Cranz al final de esta página), se lanzaría al generoso y nada aventurado mundo del cover bajo el nombre artístico de César Costa, como se le sigue conociendo hoy dÍa.
Cuando los Camisas Negras se desintegraron a principios de 1961, el grupo Los Sinners se había quedado sin su guitarrista, ya que Saturnino Guzmán, el inolvidable Saty, había fallecido en un desafortunado accidente en carretera. Horacio Reni, Fernando Bahauks y Tony Flores, amigos y colegas de Diego y fundadores del grupo, lo invitaron a integrarse para grabar y participar en una futura gira a Nogales, Sonora, la cual había sido organizada por el representante del grupo, el entonces famoso cómico Juan Kahan. Ya antes los había invitado a las tardeadas que organizabamos los Camisas Negras y, estando apercibido de la gran capacidad de cada uno de ellos, de muy buen grado acepté integrarme al grupo.
De inmediato grabamos para la RCA Victor La Novia de mi mejor Amigo y La Batalla de Nueva Orleans. La primera sería un éxito rotundo y a la fecha es considerada como un clasico del género.
Los Sinners empezaron grabando para RCA Victor. Me invitaron a grabar con ellos y a participar en una gira a Nogales, Sonora.
Grabé con ellos "La Novia de mi mejor Amigo", La "Batalla de Nueva Orleans" y no me acuerdo cuales más. Ramón Rodríguez (el actual director de los Nuevos Sinners) no estaba en el grupo en ese entonces. Yo entré para sustituír al guitarrista "Archie". Saturnino Guzmán "Saty", que había fallecido hacía poco en un desafortunado accidente en carretera. Esos, los originales Sinners estaban formados por:
HORACIO RENI: Vocalista y armónica
FERNANDO BAHAUKS: Batería
TONY "EL TIBIO" FLORES: Bajo
DIEGO DE COSSIO: Guitarra.
FERNANDO BAHAUKS: Batería
TONY "EL TIBIO" FLORES: Bajo
DIEGO DE COSSIO: Guitarra.
Como dato curioso (y hago aquí un paréntesis para esta anécdota), te diré que Tony "El Tibio" fue el que llevó a César Roel con Paco de la Barrera, director artístico de Orfeón, para su casting como solista. Aún más curioso resulta que la cita era para él mismo para que hiciera su casting, y según sus hermanos Carlos y Kiko Flores, Tony no se animó a hacer su casting porque se sintió "feíto y prietito" y prefirió llevar a César. Lo increíble del asunto es que Tony con el tiempo se convirtió en el más formidable cantante que haya dado México.
El y sus hermanos emigraron a USA de "mojados" y después de muchas vicisitudes, llegaron a Las Vegas, y Tony en una ocasión suplió a Tony Bennet y les dejó un paquetazo a los demás artistas. Carlos Flores llegó a ser el estilista de la esposa de Ronald Reagan a quien le cortaba el pelo. En 1982 los Flores ya estaban de regreso en México DF y, sabiendo que yo estaba bien instalado en Cancun, me llamaron para que les echara una mano para que los recomendara en Cancun.
Carlos es un estupendo cantante y Kiko no se queda atrás. Así es la vida y sus incomprensibles laberintos. Para terminar este capítulo, yo me salí del grupo a principios de 1962 para dedicarme de lleno a Los Hermanos Carrión y para iniciar poco tiempo después mi carrera como solista de guitarra. La foto al lado de este texto, aparezco con Mayte Gaos en el año 1962.
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